No has hecho nada para merecer mi perdón,
ni siquiera me lo has pedido.
Pero no me voy a permitir
malgastar mi tiempo en odiarte.

disfuncional

esto no sirve para nada
respiración mecánica
convulsiones de pánico
inspiración
expiración
inspiración
desesperación

me bailo un chotis en tu puerta maja
pa que veas que lo valgo
y me muero de verguenza
si no me miras o me caigo

derramo un jarro agua fría
sobre tus rosas en ramo
la decepción ya me fía
soy un cliente abonado

alegre como una hiena
merodeando en tu puerta
me hago pis me hago pis, mierda!
la risa se me rebela

frío

dónde vas tú niña loca
quieres volverme a mí loco
vas a dejarte de besos
vas a mirarme a los ojos
vas a decirme lo pronto
que se termina todo

voy a alejarme despacio
como si me mirases de lejos
tarareando algún ritmo
sencillo como tus senos

me acorde de repente
que había estado contigo
jugando en la laguna
chapoteando en el río
descansando en la orilla
durmiendo sin frio

ya no abro más las ventanas
ya ha llegado el invierno
con el vaho de mi desaliento
dibujo en el vidrio tu cuerpo

eeeeeeeooooooooooooooooooooo

día menudo

a todo tronar comienza esta desventura
a todo tren las máquinas bufan
arrollando corazoncitos
qué deslenguada esa señora
con su arrogante sinceridad

Empezado

El punzón que rasca la madera
La sierra que muerde incisivamente
Las puntas que se hincan
Son de mis cosquillas
compañeritas
Rumores parecidos
a los arrullos animales

Campuzo

A partir peras de un olmo
desterrado de mi yeco
ando despacico
meditando

Partitura

entrerrayas
laaaaaargas
muy laaaaaaargas
despedidas de sus nosecuantogramas
huérfanitas de sus notitas
córcholis cuánta amargura

aspa putacucharruca casuya
sepurria
desa muña astucaturra
gaais traais
ecraais mastia catelais
dura meira deria
tinga sebitendia
sei

Entretenido

una vez me clavé una astilla del casco de un bajel pirata en el dedo meñique
desde entonces urgo cada día en la herida con uñas y dientes
maldita fibra diminuta

Por mis actos me conocerás

Por mis actos me conocerás
Por los cadáveres de mis cunetas
Recordarás la aspereza de las puntas de mis yemas
Tu pecho se congelará
Por el azul reseco de mis ojos encendidos
Tu pálpito enmudecerá
Tu sonrisa se amuecará
Por amor te escaparás
Corriendo
Corriendo
Por los caminos escarchados

Por el enorme vacío

Por el enorme vacío que deja la inocencia
Detrás de una cortina
Cogidos por las manos

Se acobardaban al rumor de sus sollozos

Dejando caer para no volver a levantar el telón que entristece los ojos

RUIDO RUIDERO

Sordo es el sonido que rumia detrás de mi oreja lisiada. Un nuevo paisaje. Una luz distinta. Un misterio pequeñito. Por fin algo diferente. El amor al ruido del silencio detrás de mi oreja. Las palabras de las otras bocas parecen ridículos recuerdos que no dejan de hacer el pasmarote. El ruido tontorrón de las mismas palabras que hilan las mismas frases se volvió una mueca divertida. Estoy casi decidido a meterme la otra semilla en el oído sano. Sólo un par de canciones más